10 Apr
10Apr

Por: Diana García P.


Donald Woods Winnicott, nació en Plymouth-Londres el 7 de abril de 1896, sus padres fueron Frederick Winnicott y Elizabeth Martha Woods hija de un importante farmacéutico, creció en un núcleo familiar de clase media alta, su padre se dedicaba al comercio, negocio que les dejó vivir acomodadamente y que fue combinado en varias ocasiones por la política, alcanzando a ser alcalde de la misma ciudad costera y tranquila donde radicaban, logrando ser nombrado "Sir"; este matrimonio se compuso de tres hijos, Violet, Kathleen y Winnicott el menor y el único varón.

Winnicott fue criado en un hogar con enormes jardines y arboles frutales a su alrededor, una casa muy amplia, que también albergaba un estanque y un huerto, la cual era muy admirada por los vecinos ya que era una casa hermosa y muy frecuentada. Se dice que Winnicott fue muy apegado a su niñera, debido a que su padre estaba constantemente ocupado en sus negocios y pasaba poco tiempo en casa, aunque frecuentaba la iglesia cada ocho días, el padre de Winnicott le permitió encontrar su propio nivel de creencia religiosa, lo cual fortaleció su propio nivel de independencia, la cual más adelante reafirmó en su teoría.


Su infancia y adolescencia estuvo rodeada de la presencia femenina entre su madre, sus hermanas y  la servidumbre de su hogar, lo cual le permitió que en su niñez, se fortaleciera un desarrollo óptimo de crecimiento en un ambiente de completa confianza, lleno de seguridad y sobre todo protección, que quizás se dice fueron los factores que entonces le hicieron cuestionarse sobre la importancia del Rol femenino en la crianza de los  hijos y que lo llevarían más adelante a formular interesantes teorías sobre el vinculo madre-bebé.

Estudios...

Winnicott siguió un esquema de Instituciones exclusivas de varones, a los 13 años  fue internado en una escuela metodista de Cambridge, en la cual se le enseñaban diversas actividades físicas y culturales y donde logró hacer buenas amistades, aunque su padre insistió en que este siguiera su mismo camino en el comercio, Donald no aceptó ya que su meta para entonces después de una lesión de clavícula que sufrió, fue convertirse en médico. Fue en 1916 que ingresó a estudiar biología y se inició en la medicina en el Jesus Collage en Cambridge.

Dejó un tiempo la carrera debido a que ingresó a la Marina en tiempo de Guerra, una vez terminada esta, retomó sus estudios en el St. Bartholomew´s Hospital Medical College, llevándolo a conocer  e interesarse en el psicoanálisis debido al interés que despertó en él, la relación que existía entre medico-paciente, encontrándose con el trabajo de Sigmund Freud, el cual le provocó un enorme interés  en sus teorías y que entonces cambió su camino.

En este tiempo se dice, tomó al psicoanálisis solo como un pasatiempo, lo cual le permitió ejercer su profesión completamente entregado a esta, para más adelante lograr entonces especializarse en "Pediatría", se dedicó 40 años completamente a esta rama y con grandes contribuciones en la investigación de diversas enfermedades, pero lo que siempre le distinguía de otros profesionales era su manera de tratar al paciente, ya que no solo se enfocaba en la parte medica, sino también trataba de buscar la parte emocional que les afectaba a sus pacientes en dichas enfermedades.

Cambió la medicina por la psicología...

Winnicott notaba que mucho de lo que sus pacientes cargaban de su enfermedad, tenia que ver con aspectos emocionales que contenían de su infancia, por lo tanto comenzó a interesarse mas en la psiquiatría y psicoanálisis en niños que en la propia pediatría, de hecho fue paciente psicoanalítico de J. Strachey. Para 1927 decidió ingresar al estudio del psicoanálisis, en el instituto Psicoanalítico de Londres, logrando así ser psicoanalista de adultos en 1934,  posteriormente para 1935 logró en Reino Unido ser el primer psicoanalista especializado también en niños.

No le importaba tanto el aspecto económico que le pudiera generar esta nueva profesión, sino más bien, el poder investigar a fondo los problemas psicológicos de sus pacientes, más tarde logró una gran amistad y formación psicoanalítica de la mano de la hija de Freud y de "Melanie Klein", quienes también se interesaron en la psicologia infantil, Winnicott quedó encantado con los postulados de  Melanie, ya que su trabajo le fue de suma ayuda para comprender los primeros años de la infancia, por lo cual solicitó que fuera esta su supervisora en el análisis con niños.

Su inicio en el tratamiento con niños...

Construyó sus propias teorias sobre el vínculo entre madre-bebé, a partir de sus consultas fue inovando entonces la psicología clínica, Winnicott compartía las ideas de Melanie Klein sobre la importancia del primer año del bebé, sin embargo posteriormente y debido a algunas diferencias de pensamiento entre Klein, Winnicott y Anna Freud, se formaron tres grupos distintos de la misma corriente psicoanalítica, dirigidos por cada uno de estos personajes, siendo el "Middle Group" el de Winnicott.

Para Winnicott los años de guerra fueron los mejores años de su investigación y de gran aporte, pues su trabajo se centró en trabajar con niños que se encontraban muy perturbados por dicha situación y la separación de muchos de estos de sus familias nucleares, fue ahí que surgió la idea del estudio  sobre la constitución psíquica del niño y el rol que la madre ejercía sobre su hijo.

Aportes en el tratamiento con niños...

Winnicott formuló su propia teoría sobre las relaciones objetales, dio más valor al juego del niño como una técnica eficaz de atraer la realidad psíquica del niño a la escena psicoanalítica, trabajó tanto las ansiedades infantiles, como los conflictos y las defensas primitivas tanto en niños, como en los adultos, siempre tomando al igual que Freud y Melanie a la interpretación como una herramienta fundamental para la eficacia de la terapia en niños y adultos.

Winnicott consideraba que el buen o mal desarrollo del niño se forma o deforma en el medio ambiente en que este sea criado y creía que el funcionamiento del infante dependía especialmente de la relación que este consolidaba o no con la madre y los cuidados o descuidos de esta hacia su hijo, por lo cual consideraba que el sostenimiento psíquico del niño tiene que ver con su crianza y si esta fue eficiente o deficiente y por tanto ciertas necesidades básicas puede que no quedaran completadas como debían de ser y por tanto se derivan en problemas para el niño.

Por lo tanto, Winnicot creía que la mejor manera de poder obtener información certera del niño era a través del juego, donde el niño proyecta todo aquello que vive o trae cargando consigo y le permite entonces al niño lograr comunicarse, sentirse comprendido y escuchado, ya que se permite desfogar todos aquellos sentimientos mal encausados que trae consigo y que quizás inconscientemente ni siquiera tenía idea, pero a través del juego se permite dejar fluir y expone sus carencias emocionales a lo que Winnicott llama "Interrupciones en la continuidad existencial" y de los cuales el niño no es consciente, pero este ejercicio de juego le permite al niño entonces expresarse y vivenciar la situación real y lograr así descargar todo aquello que no le hace bien o le lastima, logrando. entonces comenzar a curarse.

En el primer año del bebé este no es siquiera consciente de su expresión corporal, todo lo hace sin intención, Winnicott creía que en realidad el bebé no tiene intención agresiva hacia la madre, sino que el mismo movimiento involuntario físico lo impulsa a la agresión, la madre al responder a esta conducta de manera negativa creyendo que es con un propósito negativo hacia ella, puede provocar en su bebé una alteración emocional mala, sintiéndose incomprendido y a su vez siente que ha destruido a su objeto de "Amor", lo que le trae como consecuencia el llamado falso "Self".

De cierta manera cuando el niño crece y por alguna razón en un arranque llega a ser incomprendido por la madre, quizás en un ataque de frustración y este es ignorado por su madre, puede llegar a sentirse completamente incomprendido, por lo tanto durante la terapia se necesita que aun a pesar de logre sacar su ira, el terapeuta siga ahi, para que entonces el niño logre ver que a pesar de que se desahoga, puede seguir conservando a la persona y por  lo tanto se animará a seguir trabajando.

Winnicott tenía una enorme tendencia a creer que lo más importante es que el paciente se sienta atendido, pero ¿hasta qué punto o grado de ira debe aguantar el terapeuta?, son algunas especificaciones que Winnicott nunca hizo, ya que se centraba mucho en poner énfasis en que el terapeuta ante el paciente debe de acatar un comportamiento y actitud completamente neutral, creía que la terapia ayuda al paciente a encontrar sus propias respuestas, de manera que le permitas al paciente ser independiente de ti y sobre todo que sea y se sienta completamente autor de su propios aprendizajes.

Para Winnicott un enorme problema son aquellos pacientes que desarrollan un "Self falso", donde dejan de ser ellos, para entonces adaptarse a lo que los demás les exigen ser y hacer, sin tener una "Autenticidad propia" y sometiéndose al "Deber ser", para ser aceptados o sentirse así, Winnicott encontró que la mejor manera de ayudar a dichos pacientes no es la "Confrontación" ya que podría desatar lo contrario a la curación, quizás por el nivel de ansiedad que les surgirá, sino más bien ayudarle y hacerle ver que el problema radica en su "IDENTIDAD".

Para Winnicott lo más importante es que el paciente en terapia se sienta escuchado y comprendido, pero también en brindarle las herramientas adecuadas para que este logre explorarse y comprenderse y así entonces lograr un mejor funcionamiento de sí, pero siempre de una manera que el psicoanalista logre entonces trasmitir eficazmente al paciente su propia información, que le permita entonces avanzar y curar.

Los aportes de su obra...

Para Winnicott el primer año del niño es fundamental en cuanto a la relación madre-bebé, ya que este momento es la base sobre la que el infante se construye su personalidad, por lo tanto su entorno será fundamental, para que logre un desarrollo sano, es aquí donde surgen entonces los sentimientos de seguridad y amor que el niño percibirá de su madre, un desapego de esta relación puede perturbarlo más adelante, pero también una relación de apego puede desencadenar en el infante un apego patológico, por lo tanto debe preservarse un equilibrio entre estas dos fuerzas.

Permitirle al niño la gratificación, le ayudará a desarrollar su verdadero yo, lo opuesto a esto, es la frustración, derivando más adelante un "Falso self", que puede desencadenar una patología que no le permita desarrollarse adecuadamente, en la lactancia la madre debe gratificar, pero poco a poco también frustrarlo, de tal manera que el bebé logre entender poco a poco que el pecho no es una extremidad de él, para que entonces logre ver que él y la madre no son uno solo, lo cual lo planta a la realidad y lo lleva a externar también sus necesidades propias y entonces a la ruptura entre madre-bebé, este logrará independizarse.

La independencia del bebé lo lleva a buscar nuevos objetos a los cuales Winnicott llamo "Objetos tradicionales", entonces el bebé logra descubrir que existen otros objetos o lugares, que pueden substituir a su objeto de deseo "Su madre", por ejemplo un juguete, una cobija, etc. Esto le permitirá al infante entonces poder obtener más adelante independencia y autosuficiencia de sí mismo, brindándole "Autonomía".


Sus principales aportaciones:

"Realizó 190 publicaciones entre estas, están tanto artículos, como libros."

1.- El niño y el mundo externo.

2.- Escritos de psiquiatría y psicoanálisis

3.- El niño y la familia.

4.- Psicosis y cuidados maternales.

5.- El proceso de maduración y el ambiente facilitador.

6.- Realidad y juego.

7.- La consulta terapeutica y el niño.

8.- Clinical notes on disorders of childhood.

9.- Psicoanálisis de una niña pequeña.

10.- Sosten e interpretación.

11.- La defensa maniaca.

















 

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