11 Oct
11Oct

Por Josselyn Maya

¿Por qué el perfeccionismo puede ser nuestro peor enemigo?


Esa constante presión, por la "perfección", ya sea por miedo a fracasar, a veces no nos permiten disfrutar de las cosas que hacemos, esa preocupación constante, porque no queremos decepcionar a los demás, por algo que hacemo, a veces pasa, que por esa presión, preocupación, las metas que tenemos, se posponen o simplemente no las hacemos, por el mismo miedo a fallar, fallarte a ti o fallarle a alguien.

Queremos ser perfeccionistas porque no queremos ser rechazados, queremos sentirnos aceptados, por algo que hacemos.

Ponernos metas, está bien, pero querer hacer todo "perfecto" tal vez no es imposible, pero a expectativas de los demás, que sean demasiado altas a la nuestras, puede llegar a frustrarnos y al final todo puede salir mal.

Y ¿qué pasa si todo sale mal?

Primero, esto puede reforzar la idea que a veces tenemos, "yo tenía razón y todo salió mal" y castigarnos muy fuertemente, simplemente "porque no salió como yo quería" y entrar en un estado negativo, y a veces hasta dejar de hacer cosas, por este simple hecho.

"Amigo no seas perfeccionista. El perfeccionismo es una maldición" - Fritz Perls

Hay que aprender a soltar, y aprender que las cosas se pueden salir de control, claro, ponerle todo nuestro esfuerzo, disfrutar el proceso, pero también aprender que hay cosas que pueden fallar y después, aprender para mejorar ese error que cometimos, porque está bien fallar, no podemos hacer todo bien y de los errores se aprende, está bien aceptar que no todo lo que hacemos, está bajo nuestro control, y aprender a aceptar todo esto, es un gran paso.

Comentarios
* No se publicará la dirección de correo electrónico en el sitio web.
ESTE SITIO FUE CONSTRUIDO USANDO